La incertidumbre y los cambios de rutinas que acompañan a este septiembre pueden agudizar las preocupaciones de las personas que se incorporan al trabajo, tanto si pueden hacerlo desde sus casas como si no. Esa preocupación, sumada a otros factores, puede derivar en ansiedad. Desde el punto de vista de la gestión de los Recursos Humanos, hay muchas iniciativas que se pueden poner en marcha, y que en general están atravesadas por una premisa fundamental: las circunstancias excepcionales que vivimos a nivel global tienen consecuencias en las personas con las que trabajamos, por eso, la comprensión, la conciliación y la comunicación fluida son más importantes que nunca.
Explicar razonadamente las medidas de protección y prevención que se hayan diseñado, y abrir la puerta a escuchar e implementar sugerencias de los trabajadores y trabajadoras puede ser muy útil para facilitar la reincorporación presencial y garantizar la salud tanto física como mental. Reuniones por departamentos, guías explicativas o carteles en las instalaciones para recordar los nuevos hábitos, son medidas efectivas y fáciles de implementar.
En el caso de las personas que puedan teletrabajar, es muy importante que como responsables respetemos sus horarios laborales, para garantizar su desconexión. Sin descanso, la salud se resiente y la productividad disminuye.
En estos momentos tan complejos, es importante también transmitir tranquilidad a las personas que trabajan para nosotros, flexibilizar sus horarios para permitir la conciliación de la vida personal y laboral, y recordarles que existe una vía de comunicación permanente para compatibilizar los intereses de la empresa con las necesidades de las personas que trabajan en ella.
En estas circunstancias es momento de confiar en la capacidad de resiliencia del ser humano, en la capacidad para superarnos en momentos difíciles y de hacer lo mejor dentro de lo posible ante las adversidades; en la inteligencia colectiva que nos ha ayudado a sobrevivir como especie y a encontrar soluciones a amenazas de gran magnitud. Es momento de saber que lo estamos haciendo bien si nos implicamos y hacemos todo lo que está en nuestra mano para superar este reto.